El 6 de diciembre es día de San Nicolás de Bari, fácilmente el santo que ha sido más transformado con el paso del tiempo. Fue obispo, y su leyenda cuenta que resucitó a 3 niños, y regaló oro a tres jovencitas. Por ello, sus devotos festejaban su día, regalando dulces y juguetes a los niños, el 6 de diciembre. Esta festividad, se mezcló con otras de otros países terminando el 25 de diciembre, no por la navidad de Jesucristo, sino por otras costumbres incluso anteriores a esta. De alguna forma, el nombre de San Nicolás, terminó por pronunciarse como Santa Claus. Y no siempre ha sido un gordito barbón, vestido de rojo y diciendo ‘jo jo jo’, esa fue un aportación de la empresa Coca-Cola.
También estuve recordando de cierta ocasión en que los
testigos de Jehová visitaban mi casa, y me tocaba escucharlos, diciendo que
festejar la navidad no es de cristianos por que Jesús no nació un 25 de
diciembre. Y tienen la mitad de la razón, y espero a nadie le sorprenda esto,
pero Jesús no nació un 25 de diciembre. Para empezar, en aquel tiempo no eran
los mismos 12 meses que tenemos ahora, eran menos y con otros nombres. Los
testigos daban razones bíblicas de porque no pudo nacer en invierno, y que su
fecha debió ser en primavera (Lc 2,8). No existe ningún dato histórico que diga
la fecha exacta en que Jesús nació, pero una persona tan importante para muchos
y razón de vivir de algunos, tenía que festejarse su nacimiento algún día.
Algún día, un amigo, que se dice ateo, me mostró un video en
Internet donde decían que el cristianismo era una serie de mentiras creada a
partir de otras cosas ya existentes antes de Cristo, como festejos a un dios
sol, nacido un 25 de diciembre, visitado por 3 reyes. Pero están pensando las
cosas al revés. El hecho de festeja el nacimiento de Jesús el día 25 de diciembre, tiene
como objetivo inicial reemplazar esas festividades dedicadas a otros dioses. Y
en ninguna parte del nuevo testamento dice que lo hayan visitado 3 reyes magos,
ni dice que eran 3, ni que eran reyes. Dice ‘unos magos
que venían de oriente’ (Mt 2,1). Los nombres de Melchor, Gaspar y Baltazar
provienen de evangelios no incluidos en los canónicos (Mateo, Marcos, Lucas y
Juan), y si no se incluyeron es porque
se dudaba de su valor histórico e inspiración divina.
Todos estos datos, los usan los que
están en contra de la religión para decir que el clero nos está mintiendo, pero
no. Sólo están ocupados en otros asuntos que les impide sacarnos del error a
todos, pero a quien individualmente pregunte, conocerá la verdad, y la verdad lo
hará libre.
Aquello de que lo importante no son los regalos sino el convivir
con la familia, ya está bastante repetido en cada programa, serie y película
navideña. Pero aun así, es cierto. No pido que le quiten la ilusión a los
niños, que tienen la esperanza de recibir un juguete, y no unos calcetines.
Pero no caigan en el juego de gastar todo el dinero que no tienen, a 24 meses
sin interés, en cosas que no van a durar más de 3, y al final, los únicos beneficiados
serán los empresarios, que usan muy bien a Santa y sus Renos.
Al final de cuentas, el mundo actual usa el 25 de diciembre
para todo, menos para recordar a Jesucristo. No les voy a decir que vayan a
Misa (aunque si me gustaría que fueran), quien lo va a hacer, lo va hacer ya sea
que se lo diga o no. Pero, aunque no haya sido su cumpleaños, acuérdense de a
quién estamos festejando, y no es Santa Claus.
“Honraré la Navidad en mi corazón y procuraré conservarla durante todo
el año.”
- Charles Dickens.
- Charles Dickens.
¡Feliz navidad! =)
Gilberto Félix, diciembre 2012.
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